Originalmente planeada a estrenarse en mayo del 2015, Batman v Superman: Dawn of Justice llegó por fin a las salas de cine en todo el mundo el pasado 24 de marzo, casi un año después de su fecha inicial. Siendo uno de los filmes más esperados del 2016 y secuela directa de la polémica Man of Steel (2013), ¿quién iba a decir que seguiría los pasos de su predecesora en cuanto a críticas y reseñas? Más importante aún, ¿merece BvS la negatividad con la que ha sido rodeada en su primer fin de semana al público? Nunca antes había encontrado opiniones tan divididas sobre una película basada en héroes de cómics, mucho menos con un filme en el que nuestro venerado Caballero de la Noche se hace presente; tomando en cuenta, además, que su última vuelta por la pantalla grande fue tremendamente glorificada gracias a la dirección de Nolan y el desarrollo de su trama y personajes. ¿Entonces por qué esta vez no fue así?
Batman v Superman: Dawn of Justice es dirigida por Zack Snyder, quien no es, para nada, un principiante en el ámbito de llevar novelas gráficas a la gran pantalla, pues entre sus obras destacan la magnífica 300 (2006) y la ignorada, pero muy bien realizada y fiel a su contraparte homónima Watchmen (2009); la cual es, de hecho, una de mis historias preferidas tanto gráfica como filmográficamente. A este historial se añade la ya mencionada Man of Steel, que no pasó desapercibida en su momento, pues fue duramente criticada por la temática melosa del filme y su último acto, en el cual media ciudad Metropolis es destruida gracias a la enorme batalla que llevan a cabo Superman y el General Zod, donde el segundo es asesinado por nuestro protagonista y no hay consecuencia alguna frente a éste por la devastación ciudadana. Afortunadamente, esto se ve arreglado en BvS, donde observamos, de nueva manera, la dura pelea entre ambos kriptonianos, esta vez desde el punto de vista de Bruce Wayne. La escena es impactante y marca una de las razones por las que Wayne, así como miles de habitantes en Metropolis, no quieren a Sups en el camino: es peligroso.
Hay que decirlo antes de continuar, esto no es Marvel. Tanto Snyder como DC Comics han declarado que su nuevo universo cinematográfico irá dirigido a un público más adulto que el de la competencia. Buscando tramas más desarrolladas y complejas, con antagonistas mejor pulidos y mayor crudeza en sus historias. Digo esto porque una de las principales quejas que he leído en críticas y redes sociales es la existencia de muchas subtramas al inicio del filme, haciéndome creer que buscaban algo lineal y muy fácil de digerir, sin darse cuenta de que éstas son necesarias para entender las razones de los protagonistas y antagonistas por encararse, habiendo una unión muy inteligente y sin notarla de todas las historias a mitad de la película.
Claramente habrá escenas que no todos entiendan o considerarán absurdas, pues hay que saber de héroes y cómics de DC para comprender ciertas referencias y acontecimientos, así como notar la seriedad que Snyder buscaba implementar en ellas. Tal es el caso del sueño-visión que presenta a Batman en un mundo post-apocalíptico, gobernado por Superman con el apoyo de Darkseid (de él es el símbolo Omega) y su ejército de Parademons. En este sueño se nos proyecta una historia similar a la de Injustice, donde Lois Lane es asesinada y con ella, la humanidad que habitaba en el Hombre de Acero, volviéndose imparcial y un temible tirano. ¡Esa sería la realidad si Batman no "detenía" a Sups! Al despertar, Bruce es advertido por Flash de esta distopía (Flashpoint), quien vendría del futuro para alertarlo y evitar la muerte de Lane. Gracias a esto se nos da a entender que el universo extendido de DC (como estos mismos lo llaman) buscará apegarse más hacía el mundo de sus cómics en vez de al realista, como fue el caso de Nolan. Sin embargo, otra de las escenas que más burlas y odio ha generado es el perdón que recibe Superman de Batman cuando éste estaba a punto de matarlo. Dawn of Justice buscaba dejarlo claro con su comienzo, mas tal parece que no lo logró, pero el contexto de las historietas en las que se inspiró sí: La conexión en el nombre de "Martha" va más allá de lo que muchos piensan. La idea con la que Bruce decide convertirse en el Caballero de la Noche se basa en no permitir que alguien más sufra lo que él al perder a sus padres, así fuese un ciudadano promedio o Superman. Esa es la promesa que Batman se hizo a sí mismo para ser quien es, que le hace al Hombre de Acero para que no pase por lo mismo: "Martha no morirá esta noche".
Por último, pasemos a los personajes, y es que jamás había visto a un cast que prometía tan poco pero que consiguió todo lo contrario. Ben Affleck es ese Batman que sientes ya conocías desde hace tiempo y eso en verdad me resulta impresionante; pues, como Bruce Wayne, logra capturar ese encanto masculino de coquetería que no había visto desde las series animadas con la voz de Kevin Conroy; y como el Hombre Murciélago logra una agresividad muy bien justificada (donde, se supone, lleva 20 años bajo la máscara) y una técnica de combate idéntica a la de la saga de videojuegos Arkham, un detalle que me encantó; sin embargo, carece del toque detectivesco que lo convertiría en el héroe definitivo (no olvidemos que es "el mejor detective del mundo"), pues éste no se vio casi nada durante el filme. Así mismo, Jeremy Irons es, a mi parecer, el Alfred menos parecido físicamente a los anteriores pero, sin duda alguna, su trabajo como éste es excepcional, a pesar de su poco tiempo en escena. Y ni hablar del nuevo concepto que le fue asignado a Lex Luthor (Jr.) y la increíble interpretación que le da Jesse Eisenberg, así como Gal Gadot siendo Wonder Woman, quien era de la que menos se confiaba pero que entregó un personaje totalmente único. Lo poco que pudimos ver de los miembros restantes que conformarán la Justice League ¡fue fenomenal! Tanto Flash, como Aquaman y Cyborg me parecieron muy bien introducidos y nada forzados. Inesperadamente, de ser un personaje principal en MoS, Amy Adams pasa a segundo plano como Lois Lane en BvS, y aunque Henry Cavill nos entrega de nueva manera a un buen Superman, su conexión con el espectador se sigue sintiendo forzada, por lo que comprendo que más de uno no se haya sentido mal con su deceso. Aun así, fue un buen y triste detalle añadirlo en el filme (que por cierto, es una referencia a The Death of Superman), mas me hubiera gustado que nos dejaran por un par de entregas más con el misterio de su regreso.
Batman v Superman cumple triunfante con su objetivo: Emocionar al fanático más aguerrido y al espectador que le tenga un gran cariño a cualquiera de los dos personajes, entretener al público convencional y aburrir a aquellos que buscaban una historia lineal y simple. Para muchos, será la mejor película de superhéroes jamás hecha y para otros, de las mejores. En lo personal, siento que BvS no puede ser odiada como otros más dicen hacerlo, pues en verdad se nota el amor, tiempo y dedicación con la que fue realizada. Ahora sólo queda esperar a Suicide Squad y emocionarse por lo que será de la primera película de la Justice League.
Calificación: 8 de 10.
Imágenes propiedad de Warner Bros.
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